CAMPAÑA DE VERANO LARRA agosto 2014

Como todos los veranos en el mes de agosto toca campaña en Larra. Esta vez, como viene pasando ya en los últimos años, estamos divididos en dos campamentos; con el  corazón partido por que queremos estar en los dos pero no es posible,  nos organizamos en dos equipos.

ARRIBA:
Empezamos arriba en el campamento organizado por la FNE- UEV, en la BU-56 (Illaminako Ateak), en donde se sigue con la exploración río arriba (Río López) y con la topografía (nos hemos propuesto repetir toda la topografía, pues la actual es imprecisa e inexacta). Entre otras cosas se explora algo más de 1.5 km nuevos en Budoguia -lo que a estas alturas no está mal-, ascendiendo hasta una altura muy próxima a la superficie del valle glaciar. También se topografía toda la zona de entrada, importante para poder ubicar todo el sector explorado entre este año y el pasado; además se hacen desobstrucciones en otras cavidades de la zona, buscando otros caminos.
La meteo se ha portado un poco mal con nosotros, con algunas crecidas y situaciones bastante penosas en la sima, lo que contribuye a no perderle el respeto.
Compartimos el campamento en la Hoya de la Solana con los madrileños de Kieto y el colectivo CAVEX, una amalgama de rusos, ucranianos, ingleses, franceses, bulgaros, israelitas, portugueses y españoles -amplio y heterogéneo colectivo, aunque de alguno de estos países solo haya un representante-; les ayudan también militares de la UME. Los del CAVEX atacan los sifones del fondo de Budoguia, consiguiendo una continuación importante post-sifón.

Mas informacion en Regreso a la BU-56




ABAJO:

Tras los primeros días arriba algunos bajamos al camping de Ansolaze (en Isaba), donde nos esperan los compañeros de Rodez y Millau con otros colegas, también franceses, además de indonesios y japoneses, un verano muy internacional.
Nos centramos en la AN-43 y en desescombrar otras cavidades (de nuevo buscar otros caminos que permitan las ansiadas uniones).
En la AN-43 mucho trabajo y pocos resultados, entre ellos la escalada de varias chimeneas sucesivas que suben en conjunto más de 80 m; por delante queda una escalada de más de 35 m con sus paredes cargadas de piedras.
En la punta de Errekaeder parece que la cosa sigue muy interesante, aunque la lejanía y peligrosidad del trayecto retrae a muchos, lo que deriva en trabajos de acondicionamiento para mejorar el camino ¡todo sea por que aumenten las vocaciones!.