La celebración de Santo Tomas les sienta mal a algunos, lo que deja muy
mermado el equipo, además la zona de barrizales explorada la semana
anterior es una zona para compartir; todo ello provoca un cambio de objetivos, por lo que
-con un equipo más reducido de lo previsto- vamos a la zona de acceso al sector de los toboganes, en la RN-103.
En esa zona, el avance hacia el este ha requerido de varias escaladas,
que han dejado en la parte contraria sendas galerías colgadas; aunque a
priori parece que acabaran desfondadas sobre zonas conocidas, hay que
explorarlo y topografiarlo; son restos de paleniveles
que bien podrían esconder alguna sorpresa.
Como suponíamos la configuración de la zona supone distintos niveles
excavados a favor de las mismas fracturas, en la que la disolución en
condiciones freáticas ha horadado una especie de laberinto vertical, con
travesías, pozos y escaladas que hacen que la
exploración taladro en mano sea complicada, aunque disfrutona; por
desgracia los resultados son más bien pobres para tanto esfuerzo.
Al final tres incógnitas resueltas –incluyendo una pequeña galería
lateral- con numerosos cierres a galerías ya conocidas. En conjunto los
nuevos conductos apenas suman 100 m en total.