martes, 28 de mayo de 2019

25.05.2019 / RN-103 escalada en galería Olentzero

 
La meteo no nos ofrece condiciones estables así que decidimos no encaminarnos a continuar la exploración de la galería Cochina, en donde no queremos lluvias ni en pintura. En su defecto nos dirigimos hacia la G. Olentzero, para abordar alguna de las escaladas que en ella nos aguardan. 

Avanzaremos hasta cerca de la Falla, comienza a ser un viaje largo, pero no sería todavía necesario el uso del vivac. Aun así dos del equipo tienen ganas de probar el abrazo de los sacos de dormir  y la pitanza calentada en hornillo, por lo que serán los elegidos para hacer la escalada, sin límite de horarios. El resto nos retiraremos antes haciendo algunos trabajos de balizamiento y también fotos. Dejamos a los troglobios enfrascados en la labor a + 15, después de vencer un extraplomo.
El domingo nos informan que han terminado la larga escalada pero arriba el premio se limita a 25 tristes metros de galería que caen de nuevo sobre Olentzero por una ventana no vista.
No nos sorprende mucho, de echo pensamos que la exploración de todo ésta galería (y las que le siguen) ya no nos aportaran grandes alegrías, pero sí mucho trabajo para ir realizando algunas de las largas escaladas que observamos en el avance.
Por nuestra parte lo intentaremos no dejando ninguna incógnita pendiente, al menos las que localicemos.




martes, 14 de mayo de 2019

11.05.2019 sima Gatxarrieta I / Topografía galerías colgadas



Este sábado aprovechamos para realizar un antiguo trabajo pendiente no muy atractivo, pero necesario. Nos desplazamos hasta la sima de Gatxarrieta I (G-117) ubicada en la Campa de Arraba (parke natural del Gorbeia).
Se trata de hacer de nuevo la topografía de una galería colgada en el pozo de entrada, a la que accedemos mediante un largo pasamanos. En su día se perdió la topografía de la cavidad..... la parte correspondiente a los pozos ya la habíamos retopografiado hacía tiempo y nos faltaba retopografiar la galería colgada, para la que nunca encontrábamos la ocasión.
Nos presentamos en la boca en una mañana fría y con mucha nube, pero afortunadamente no nos llueve. Instalamos la zona superior del pozo y el péndulo y re-exploramos la zona antes de hacer la topografía. Nos sorprende lo poco que recordábamos el pequeño sector que es un laberinto tridimensional de pequeñas galerías freáticas en la que se conjugan galerías de dimensiones modestas y cortas gateras.
 
Una vez reconocido el sector comenzamos la topografía. En varios puntos nos parece notar una tímida corriente de aire y paramos otras tantas veces para intentar comprobarlo. Tras finalizar la topografía sumamos las 31 poligonales que nos dan un resultado de 150 m de desarrollo. 
Nos retiramos de la sima dejando tres incógnitas para una futura ocasión en la que dispongamos de más material y más tiempo.
Una de las incógnitas es una corta escalada a iniciar despegando de un suelo encharcado en una chimenea. Serán solo unos 4 o 5 metros a subir, pero defendida por paredes embarradas con al menos 10 cm de espesor de barro.
 
La segunda incógnita es revisar bien un pozo lateral que se inicia en la rampa ascendente que comienza nada más finalizar el péndulo. Hay que descender un par de verticales (que parecen conectadas entre si) y hacer una travesía a una ventana colgada enfrente de la cabecera de acceso a uno de los pozos.
La tercera incógnita es revisar dos ventanas, también en el final del péndulo y sobre el pozo de 50 m. Habrá que superar varios metros en ambas travesías para alcanzar dos oquedades contrapuestas entre sí sobre la amplia fractura desfondada.
Al salir nos encontramos con Verónica y Oscar, que han venido a dar un paseo y ayudarnos a bajar material. Nos retiramos hasta Pagomakurre con luz de día, se nota que ya estamos en primavera avanzada, aunque los 7 u 8 grados de temperatura y la brisa que los acompaña nos hacen recordar el refrán que dice "hasta el 40 de mayo no te quites el sayo".



martes, 7 de mayo de 2019

2019-05-04 PRACTICA DE BUSQUEDA EN AIXAKO KOBA




Este fin de semana lo hemos dedicado a una práctica de búsqueda. cinco miembros del GAES hemos participado en un ejercicio consistente en la búsqueda de unas supuestas víctimas en la Cueva de Aixa en Itziar; una búsqueda a ciegas en una cavidad compleja, sin saber en qué condiciones ni en que parte de la cavidad se encontraban. La actividad ha sido organizada por el ELL y han participado espeleólogos de distintos grupos,  incluyendo el grupo de rescate de la Ertzaintza y equipo médico.
No se le suele dar la suficiente importancia a estos temas, pero quienes optamos por la espeleología de exploración deberíamos dársela. Los descubrimientos solo suceden en lo desconocido y esa es una zona que puede estar llena de peligros. Estaría bien tener las espaldas cubiertas por gente que sabe desenvolverse en estas cuestiones.
Aunque entre los resultados pese como una losa el hecho de que no se haya conseguido localizar a las supuestas víctimas, no se puede considerar el operativo como un fracaso pues, la intervención de personas con conocimiento de la cavidad y de un número mayor de rastreadores no habría sido difícil de conseguir en un caso real, lo que habría cambiado radicalmente la situación.
La experiencia de un grupo de personas buscando a alguien en una cavidad totalmente desconocida, complicada y de gran desarrollo, puede haber sido frustrante para muchos de los participantes, pero nos pone en el camino de poder afrontar situaciones que, aunque por fortuna son poco frecuentes en nuestro ámbito, hay que tener muy en cuenta. Muchos de los grupos vascos están explorando cavidades muy grandes, que pueden ponernos en una situación comprometida.

lunes, 6 de mayo de 2019

01.05.2019 / RN-85 y RN-86 finalizamos revisión

Día festivo a mitad de semana laboral que aprovechamos para realizar una actividad que requiere menos horas, además de la buena meteo anunciada. Volvemos para terminar el trabajo de revisión sobre las cavidades RN-85 y RN-86.
En la RN-86 volvemos a entrar y ésta vez sí podemos confirmar que nos oímos con la sima RN-85, justo con la cabecera del segundo pozo de 20 m de la 85. Un poco lejano, pero de modo claro, oímos trabajar al taladro.
También aprovechamos para continuar con la desobstrucción del soplador ubicado en el fondo de la gran dolina, pero apenas dedicamos unos minutos porque de nuevo podemos constatar la conexión acústica -de modo muy directo-  con la RN-85 perdiendo de ésta forma todo interés por el soplador.
En la RN-85 trabajamos con detenimiento sobre las incómodas estrecheces del fondo. Una vez más podemos confirmar que el trabajo realizado hace años (1.990) se hizo a conciencia y podemos asegurar que por aquí no descenderemos hacia el fondo de la RN-103.

También dedicamos un equipo a prospección exterior, de nuevo sobre las dolinas alrededor de la RN-89. Mucho trabajo de desbroce de tupida maleza. El primer regato que perseguimos atravesando todo un eucaliptal abriendo paso a machete nos lleva a un sumidero estacional (ahora sin caudal) que desconocemos. Aunque dado lo evidente del cauce que le alimenta dudamos si es que lo llegamos a conocer y se nos había olvidado, en cualquier caso no está catalogado. El sumidero es muy aparente y se ve que en época de lluvia traga un buen caudal. Después de un destrepe de 3 m entre bloques y un punto estrecho que sería necesario ampliar, no notamos una corriente de aire evidente por lo que lo anotamos, pero no tenemos previsto volver corriendo.

De nuevo volvemos a revisar varias dolinas en los alrededores, muy aparentes y fuertemente protegidas por maleza, que se encuentran no lejanas y un poco por encima de la gran curva de la pista que conduce al fondo de Valseca. No detectamos nada a destacar, todo está muy colmatado.
 
Ya de remontada hacia el coche y superado el pueblo de Ojebar, desde la misma carretera, volvemos a escuchar el canto alegre de una regata, que ya recordamos haber escuchado el año pasado. Esta vez vamos mejor pertrechados y no dejamos pasar su revisión. De nuevo trabajando sobre la maleza para perseguir el trazado del cauce. A unos 200 m de la fuente de la que mana el agua alcanzamos un sumidero, que no tenemos catalogado. Hablando entre nosotros es posible que ya lo conociésemos, pero al no haber podido descenderlo, en su día no lo catalogamos. Cae una cascada de alrededor de medio litro por segundo sobre un resalte de unos 3 m y abajo se observa un estrecho. Nos anotamos en la agenda volver con fuerte seca para revisar a fondo si hay posibilidades e interés en intentar perseguir el agua hacia las profundidades.

Sobre las 21 h estamos llegando a Bilbao, que mañana hay que trabajar. Día entretenido pero sin grandes alegrías, aunque al menos hemos cerrado, y también abierto, algunas incógnitas. La exploración continúa.......



jueves, 2 de mayo de 2019

Parte de guerra 27.04.2019 RN-103 Galería Jincana, alcanzamos nuevo sifón

Descendemos a la RN-103 para continuar la exploración en la galería Jincana. El 23 de abril nos paró un pozo y teníamos ilusión en descenderlo y que la galería continuase. En la zona de descenso al río dedicamos un buen rato a hacer mejoras en la instalación. Conseguimos superar el pozo de cabecera estrecha por otro punto que desobstruimos el 23. La nueva cabecera también es estrecha, pero es un paso corto y menos problemático. En el descenso también aprovechamos para cambiar cuerdas dejando aquí de 10 m.m. para llevar hacia la punta las de 9 m.m.
Ya en la galería Cochina, podemos comprobar que en un paso sifonante el agua ha borrado nuestras huellas. No hace más que confirmar nuestras sospechas, tenemos que vigilar mucho la meteo.
Llegamos al pozo por descender. Son apenas dos resaltes encadenados por una rampa, pero todo jabonoso, lo que nos obliga a dejar una cuerda de más de 20 m. Una vez hacemos pie avanzamos ansiosos pero llegó lo que esperábamos por la cota en la que nos estamos moviendo. Un feo, sucio y pequeño sifón termina con nuestras esperanzas. Los 40 m nuevos que apenas avanzamos entre paredes embarradas nos lo venían anunciando.
Tras topografiar toca retroceder. Allí estamos, con un montón de material y con el bajón. Por encima de los dos resaltes nos espera una pequeña escalada en una lateral. Por supuesto con abundante barro. Afortunadamente no nos hace sufrir mucho, una  vez arriba se acaba claramente.
Continuamos desequipando y revisando con atención los techos. En la colada grande que hay justo por debajo de la última escalada, comenzamos una nueva escalada. La topografía nos indica que allí ha habido un cambio de la dirección que traíamos en la galería Cochina y confiábamos en encontrar continuación.
Mientras escalamos intentamos comprobar si es por allí donde se pierde el aire, pero no lo conseguimos determinar. Una vez arriba de la colada de nuevo buscamos el aire pero no parece haberlo. La escalada continúa hacia arriba por un estrecho y aunque no percibimos aire, no queremos dejar de subir y ver el final con nuestros ojos. Como se nos ha hecho tarde, decidimos dejar equipada la escalada y tomarnos con calma la revisión en una próxima exploración. 
Retrocedemos portando material, no lo queremos retirar del sector por si localizamos una continuación, pero tampoco dejarlo todo al fondo y encontrarnos con un desequipe final que sin duda ya de por sí será sufrido.
Remontamos la sima con el bajón de haber perdido lo que creíamos una posible exploración, difícil y sucia, pero continuación. Ahora no tenemos claro si hay aire, no vemos incógnitas claras y el barro amenazando con robarnos las ganas.