La lluvia nos hace
replantearnos subir a Itxina, y el sábado de madrugada un imprevisto
médico deja un miembro del equipo en casa y precipita el cambio de plan
definitivo. Finalmente decidimos ir al acogedor Rasines, a realizar una
visita – entrenamiento entrando por la RN-80 a la Red del Silencio. El
objetivo de la jornada es dar oportunidad a un portugalujo, Eduardo, que
se está incorporando a éste mundillo de la espeleo, de conocer y sudar
la RN-80. El paseo incluye el clásico recorrido por un circuito en la
zona intermedia de la travesía.
La
primera sorpresa nos la llevamos en el acceso a la cavidad. La pista de
acceso al prado de Mingo se ha remodelado para hacer una entresaca de
árboles, y de paso el prado y centro de la vaguada se ha despejado de
maleza, por lo que ahora mismo se puede realizar el recorrido de acceso
a la RN-80 que realizamos en los años de su exploración (principios
década de los 80). La segunda sorpresa nos la llevamos en cuando
estábamos en la G. de los Gotxos, justo sobre la el pozo (escalada que
permite subir desde las cornisas de la G. Vasco-Occitana a los Gotxos
cuando el paso inferior está sifonado). Primero unas voces y segundo las
luces nos anuncian llegada de espeleos. Un poco más tarde nos enteramos
que coincidimos con tres espeleos madrileños que vienen haciendo la
travesía. Les avisamos que deben remontar porque el paso bajo está
inundado. Después de una corta charla, ellos continúan con su travesía y
nosotros con nuestro paseo. Ponemos rumbo hacia la sala de la Lluvia.
Finalmente salimos a superficie al atardecer, con Edu contento, pero
cansadillo del paseo, sobre todo por los pasos húmedos y resbalosos del
meandro de la RN-80.
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