Parece que le estamos cogiendo gusto a lo de los
domingos de reunión, por lo que se imponía un plan que permitiese volver a casa
a una hora razonable, de modo que nos fuimos a Itxina, pensando ya en lo que
será un nuevo libro sobre la zona, que esperamos vea la luz para dentro de un
año y que ocupará gran parte de nuestro calendario en los próximos meses. El
objetivo escogido fue la sima de Urrikobaso, a donde nos fuimos caminando bajo
una espesa niebla que alargó sensiblemente el itinerario hasta la boca. Al
final, el camino desde Arraba por Atxajausieta, que habría sido el más corto,
se convirtió en el más largo, al ser el menos definido.
El objetivo principal era topografiar los techos de la
galería superior, pues en su día, cuando levantamos la topografía de esa zona,
ni podíamos ver los techos de las altas chimeneas ni medirlos; ahora, los lasermetros
y lamparas led nos permiten dibujar todo el techo con suma facilidad.
Aprovechamos para instalar anclajes de acero inox en el pozo de 90, la más
espectacular de las entradas a la cavidad, aunque no sea la más practica para
trabajar en la sima, tal y como vimos al ser un grupo de siete personas.
Aprovechamos también para sacar algunas fotos del pozo de entrada.
A nuestra salida nos esperaba una hermosa tarde, con
Itxina luciendo primavera.
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