En
esta ocasión entramos en Txantxangorri Unai, Eneko (GEMA), Esther (GAES) y como
aporte de última hora, Maxi, un Madrileño que anda haciendo el curso de
espeleo con Eneko en Ramales. Quedamos Eneko, Unai y Esther en la
gasolinera del Haya con Maiteder, Oscar y Aitor para que nos presten un
taladro y nos dirigimos a desayunar en condiciones a Lanestosa tras
recoger a Maxi en Ramales. Entramos el sábado alrededor de las 11 y pico
de la mañana dispuestos a llenarnos de barro y para las 14:00 ya
habíamos llegado todos al vivac. Comimos algo y nos separamos en dos
grupos, cada grupo con dos taladros. Eneko y Maxi fueron a revisar un
pozo que se bajó el finde anterior y que tras una estrechez, que hay que
desobstruir, se ve otro pozo que queda por revisar. A continuación
equiparon un pasamanos en la cabecera del pozo korrika, que ha quedado
sin acabar y se ven unas ventanas arriba que hay que revisar. Por otro
lado, Unai y Esther se fueron a equipar un pozo que encontró Urtzi el
finde pasado tras hacer una escalada. Se han bajado alrededor de 80 m.
de pozo, pero hay que volver porque hay una galería a unos 15 m. del fondo
a la que habrá que alcanzar con un ancla o algo parecido pues la cuerda
baja en volado y del fondo a la galería es pared de tierra tipo embudo,
complicado de escalar. A media altura del pozo queda también pendiente
de revisar una ventana. Sobre las 11 volvemos al vivac y cenamos un
kuskus con salsa boloñesa (casera) por cortesía de Unai que nos dejó a
todos sin palabras y con ganas de repetir.
Al día siguiente nos despertamos sobre las 10 y tras desayunar,
también en condiciones, comenzamos a salir. Para las 5 ya estábamos
todos cambiados y aseados, Unai y Esther con ducha incluida porque les
pilló una buena tromba nada más salir.
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