El jueves día 1 realizamos la primera jornada espeleológica de las tres
que desarrollaremos aprovechando el puente de Todos los Santos.
Llueve y decidimos comenzar en la RN-103. Formamos dos equipos, uno
queda justo bajo el pozo de Julio Da Costa, en donde un nuevo pozo
lateral nos lleva a un meandro estrecho y seco (por el momento) en el
que una estrechez nos impide descender un pequeño pozo.
Conseguimos ampliar la estrechez y descender el pozo, pero abajo
nos aguarda un nuevo paso estrecho. Una vez ampliada ésta nueva barrera
avanzamos unos pocos metros hasta que una nueva estrechez, más larga que
las anteriores, nos vuelve a detener. El aire aspira con nitidez.
Desequipamos el sector, por el momento.
El segundo equipo se desplaza hasta el fondo del Laberinto
Liliputiense, en donde nos espera una gatera con aire aspirante a la que
hemos dedicado ya tres jornadas de desobstrucción hasta la fecha.
Continuamos con el desescombro y rápidamente vencemos el punto bajo que
nos paró la última vez. Avanzamos arrastrándonos unos pocos metros
ilusionados pero nuevamente el techo baja y tenemos que abordar un nuevo
desescombro, ésta vez más severo y que una vez superado nos premia con
un corto tramo de galería en el que nos podemos poner de pie.
Lamentablemente a los pocos metros el techo vuelve a bajar y de nuevo no
vemos desescombrando. Avanzamos unos 5 nuevos metros y decidimos parar
por hoy. Lo que tenemos por delante tiene mala pinta, es largo y de
escasa altura, afortunadamente se puede trabajar y el corto tramo en el
que nos hemos podido poner de pie nos permitirá acumular el material que
continuemos retirando y nos ofrece un pequeño apoyo psicológico en ésta
gatera en la que llevaremos unos 20 m avanzados.
Ambos equipos coincidimos en la base del pozo Julio Da Costa y remontamos la sima todos juntos.
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