Después de haber dedicado el fin de semana al cursillo de Primeros Intervinientes, hay ganas de hacer algo de exploración.
Alba, Ritxi, Iñaki y David nos adentramos por la
Canal con dirección a un afluente que hay en la g. del Sahara, en el
primer nivel fósil de la Red del Silencio. Hace unas semanas nos
asomamos a éste afluente en el que habíamos topografiado y explorado
hace más de 30 años y detectamos una pequeña cascada y también cerca una
posible escalada, que no habían sido exploradas.
Mañana hay que trabajar así que le ponemos marcha
a la entrada para no llegar muy tarde a casa. La primera en caer es la
escalada. Subimos 12 m. pero se vuelve impenetrable y el agua llega por
un curioso tubo excavado en roca caliza.
Todavía hay tiempo y nos decidimos a atacar la
pequeña escalada de la cascada. Una pequeña travesía (no se puede
abordar la escalada en vertical) nos lleva a poner pie en el meandro por
el que llega el agua. El punto a continuar es tumbados en el cauce y es
muy estrecho, intentar superar hoy éste paso significa estar empapado
en cuestión de segundos. Además, un par de metros por delante parece
evidente que se cierra. Desequipamos todo con la idea de volver sin
prisa y cuando el caudal se apacigüe.
Decidimos volver por el segundo piso fósil para
que Alba y Ritxi conozcan. Bonito paseo al que no habíamos vuelto desde
hace más de 15 años, cuando estuvimos tomando algunas fotos para el
libro del Karst de Rasines.
A las 21,30 h estamos en la calle. Objetivo cumplido, aunque sin resultados de continuación.
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